Con la tesis, curiosos arreglos de mi tendencia a dejar las cosas para último momento: como si mi organismo se hubiera adaptado a este trabajo a largo plazo y estuviera al tanto de que, por esta vez, no hubiera sido posible dejar todo para el final, fue dosificando -hasta el momento con sabiduría- los períodos de desidia y de actividad. Decido, esta tarde, no luchar con mi organismo y confiarme a su sabiduría.
jueves, 30 de septiembre de 2010
miércoles, 29 de septiembre de 2010
Miércoles 29/9/10, 20:59
Día desparejo: avanzo bien a la mañana y a la tarde me quedo un poco -hay semanas que trabajo bien a la tarde y mal a la mañana, y otras, como esta, en que es al revés. Miro el documento en que tengo apuntadas algunas cosas para los agradecimientos, género discursivo algo reiterativo. No estaría nada mal hacer el intento de escribirlos sin usar el adjetivo “invalorable” ni adverbios de modo.
martes, 28 de septiembre de 2010
Martes 28/9/10, 18:16
Ayer, mientras espero de pie, ya en tiempo de descuento, a que una alumna me entregue el parcial, se me ocurre que la imagen que componemos resume de forma bastante acabada la sensación que tengo estos últimos meses con la tesis. Como si en cualquier momento me sacaran la hoja. (Por mail, P. me pide que le mande todo a fin de mes y que entregue en noviembre). Día productivo: termino de acondicionar las primeras 20 páginas del capítulo y se las paso a J. para una primera lectura. Decisiones difíciles: activar el viaje a Río para noviembre y dedicarme a corregir la tesis en mallita, tomando caipirinhas en las playas de Ipanema, o postergarlo para cuando, amén de tomar todavía más caipirinhas en las playas de Ipanema, pueda también barrenar sin culpa ni limitaciones.
sábado, 25 de septiembre de 2010
Sábado 25/9/10, 10:47
Hace varias noches que empecé a releer, unos minutos antes de dormir, el libro de Levrero que me dio la idea de escribir un diario de la tesis. No sabía por qué, pero ahora lo intuyo: la esperanza de terminar, junto con el libro, la tesis.
jueves, 23 de septiembre de 2010
Jueves 23/9/10, 20:11
Como un maratonista dispuesto a acelerar el ritmo en los últimos metros, encaro la escritura con energías renovadas. Progresos importantes. Preocupación por la escasez de 9 de Oro: no hay en el kiosco -me ofrece Don Satur; por quién me toma-, y en el mini-mercado Erik me aferro al último paquete. Dedicar una tarde a recorrer los mercados del barrio y hacer acopio por si se agrava la situación. (Con el terreno más despejado, me detengo a inspeccionar: no me sobra nada, pero el Capilatis y los cortes en luna llena van dando sus frutos).
miércoles, 22 de septiembre de 2010
Miércoles 22/9/10, 20:11
En la excursión de ayer compruebo que si no nos llegan los ruidos del bar, tampoco lo hacen las ondas de
martes, 21 de septiembre de 2010
Martes 21/9/10, 8:24
Durante todo el proceso de escritura, la dificultad de trabajar ante la perspectiva de una interrupción inminente, o inmediatamente después de una interrupción, o en los tiempos intermedios. Horas y horas de trabajo perdidas. La necesidad, para escribir, de tener por delante varias horas sin ocupaciones, y de ir acomodándome de a poco -nunca entendí cómo J. se levantaba del almuerzo o llegaba de correr y se sentaba frente a la computadora y se ponía a teclear. Demasiado tarde para corregir todas esas taras. Más tarde: expedición al bar por el tema de Internet.
lunes, 20 de septiembre de 2010
Lunes 20/9/10, 16:05
Mañana abre el bar, de
viernes, 17 de septiembre de 2010
Viernes 17/9/10, 20:28
Superada la crisis, caigo en la cuenta de que me restan sólo dos capítulos para tener el primer borrador completo de la tesis (a lo que debería sumar las reparaciones del capítulo 4, las conclusiones y agradecimientos, y las infinitas correcciones que, de momento, prefiero no considerar). Decido comenzar con el último, que tengo más avanzado y más claro en la cabeza, y dejar el más difícil para el final: es decir para cuando, estimulado por los efluvios primaverales y la situación por demás promisoria de estar a sólo un capítulo, me convierta en una especie de bestia infernal, de tesista absoluto, o ya no me importe otra cosa que terminarla de una vez por todas.
jueves, 16 de septiembre de 2010
Jueves 16/9/10, 10:46
miércoles, 15 de septiembre de 2010
Miércoles 15/9/10, 15:00
martes, 14 de septiembre de 2010
Martes 14/9/10, 20:42
lunes, 13 de septiembre de 2010
Lunes 13/9/10, 17:13
domingo, 12 de septiembre de 2010
Domingo 12/9/10, 19:54
viernes, 10 de septiembre de 2010
Viernes 10/9/10, 17:03
Dejo para mañana la revisión de los fragmentos completos de lo que queda de la tesis, suerte de reunión de trabajo y lluvia de ideas conmigo mismo. Pongo a calentar el agua para el mate (ay, sin bizcochos) y, menos por gusto que por su oportunidad, elijo el epígrafe para el capítulo 6: “Sin embargo, hay un punto en que siento que tengo la obligación de reconocer mi error, y tiene que ver con el injusto y cruel procedimiento que venía siguiendo, que era quitarle la vida a las personas a traición, sin aviso previo, sin decir agua va, comprendo que se trataba de una indecente brutalidad, cuántas veces no di tiempo ni siquiera para que hicieran testamento, es cierto que en la mayoría de los casos les mandaba una enfermedad que abriera camino, pero las enfermedades tiene algo curioso, los seres humanos siempre esperan librarse de ellas, de modo que ya cuando es demasiado tarde acaban sabiendo que ésa iba a ser la última, en fin, a partir de ahora todo el mundo estará prevenido de la misma manera y tendrá un plazo de una semana para poner en orden lo que todavía le queda de vida, hacer testamento y decir adiós a la familia, pidiendo perdón por el mal hecho o haciendo las paces con el primo con el que estaba de relaciones cortadas desde hace veinte años”. (J. Saramago).
miércoles, 8 de septiembre de 2010
Miércoles 8/9/10, 20:00
Problemas de abastecimiento: no había 9 de Oro en el supermercado -me niego, por otro lado, a entregarme a pálidos sucedáneos: me prometí que no volvería a ingerir, nunca más, un Don Satur. Algo inquieto porque esta carencia de bizcochos resquebraje la tranquilidad -extraña tranquilidad, casi alegría- con que estoy tomando la tesis en las últimas semanas. (R. me sugiere estrategias de escritura cada vez más disparatadas: un programa con un cronómetro para escribir 25 minutos, descansar 5, escribir 25, y así).
martes, 7 de septiembre de 2010
Martes 7/9/10, 20:38
lunes, 6 de septiembre de 2010
Lunes 6/9/10, 16:10
domingo, 5 de septiembre de 2010
Domingo 5/9/10, 21:25
viernes, 3 de septiembre de 2010
Viernes 3/9/10, 11:18
Cambio rotundo de estrategia para el comienzo del capítulo: en lugar de revisar todo lo que hasta aquí tengo escrito y anotado de los capítulos que siguen, me dispongo a escribir todos los días como lo hice estas últimas semanas. Después de un buen tirón miraré para atrás y ordenaré un poco. (Instruyo a J.: de no verme escribiendo por más de una hora, que me pinche con un fierro caliente).
jueves, 2 de septiembre de 2010
Jueves 2/9/10, 21:00
Dedico el día a corregir el capítulo 1. Pego también el 5 y se los mando a mis directores. Decido ignorar el mail de doctorado: de aquí en más, ajustarme a mis propios tiempos, o a los tiempos de la tesis. “Sóstrato: Cuanto yo hacía en la vida, ¿lo hacía voluntariamente, o bien estaba hilado por